La gran mayoría de los seres humanos estamos esperando un cambio… más este año cuando se nos ha dicho que 2012 es el año de los cambios. Pero no sabemos que ese cambio depende de nosotros mismos; aunque nos parezca extraño, el cambio tiene que venir de nosotros.
Debemos cambiar nuestra forma de pensar, dejar a un lado el pesimismo. Saber que somos seres grandiosos con un potencial inmenso en nuestro interno. Debemos dejar de limitarnos y eliminar de nuestro vocabulario las palabras “no puedo”, “no tengo”, “estoy mal”, “no tengo tiempo”, etc, etc.
Tenemos que plantarnos frente al espejo y decirnos -viéndonos a los ojos- y con mucha seguridad ¡Yo si puedo!, ¡Yo estoy bien!, ¡Yo Soy Poderoso, en la Paz, en la Luz y en el Amor!. El cambio tiene que venir de nosotros para que se pueda manifestar a nuestro alrededor.
2012 es el año del Cambio Dimensional, pero si nos mantenemos en el mismo estado de conciencia no podremos unirnos a ese cambio maravilloso que se siente en el ambiente, en la naturaleza y lo estamos sintiendo nosotros en nuestros cuerpos, sin saber a ciencia cierta que es lo que nos ocurre.
Por eso no podemos seguir esperando que el cambio venga desde afuera, tenemos que sentirlo dentro de nosotros para que pueda manifestarse en todo lo que nos rodea. Olvidemos rencores y abramos nuestro corazón al amor.
Recordemos que el amor es la Fuerza más Poderosa que existe en todo el Universo, y que esa fuerza está en cada uno de nosotros. Demos amor a nuestros familiares, amigos y con más intensidad a los que consideramos “nuestros enemigos”, que al final dejarán de serlo, porque el amor lo sana todo.
Vamos, anímate…¡Únete al cambio!, que comience en tú corazón para que se manifieste en todo lo que te rodea.